Feroz disputa por envolver equipajes en el aeropuerto de Miami.
La larga y feroz competencia sobre la lucrativa concesión de envolver las maletas en el Aeropuerto Internacional de Miami (MIA) está llegando a una nueva intensidad.
Por una parte está Sinapsis Trading USA, que tiene el exclusivo contrato multimillonario para envolver en plástico a máquina el equipaje de los pasajeros en el MIA.
Por otra parte está Secure Wrap de Miami, la anterior firma titular, que fue sacada hace un año de su posición privilegiada por Sinapsis.
En ambas partes: poderosos cabilderos y abogados que alimentan el enfrentamiento con tácticas combativas.
“Hay muchos cabilderos trabajando en esto, mucha información que se da a conocer”, dijo Carlos Giménez, alcalde de Miami-Dade, quien propone un nuevo y controvertido contrato para Sinapsis. “Esto era un tema caliente cuando se aprobó el contrato y lo seguirá siendo”.
“Siempre ha sido muy controvertido y de muy alto perfil”, dijo Pablo Acosta, un abogado de Miami y cabildero de Sinapsis. “No sé si se debe a todo el dinero que está involucrado”.
Sumándose al drama: un enfrentamiento entre Giménez y Joe Martínez, presidente de la Comisión del Condado – quien planea aspirar el próximo año al cargo de alcalde – que ha dejado incertidumbre sobre cuándo la comisión asumirá el políticamente cargado caso.
El negocio de envolver las maletas es aparentemente simple: en las zonas de revisión de equipajes de MIA, las maletas se envuelven en un plástico con elasticidad que protege contra los hurtos y daños, y disuade a insertar algo en el equipaje.
Ahora, un año después de asumir la concesión en MIA, Sinapsis busca una rebaja en la cantidad que tiene que pagar al aeropuerto, al reclamar que Secure Wrap le quita parte de su negocio al envolver las maletas antes de que lleguen al aeropuerto.
Sinapsis, una compañía de Coral Gables que forma parte del gigante italiano TrueStar Group SpA, ganó el codiciado contrato en julio del 2010, al garantizar que pagaría un mínimo de $11.1 millones anuales al aeropuerto propiedad del condado. Esa ambiciosa oferta superó la de $4.1 millones anuales de Secure Wrap – casi cuatro veces de lo que había pagado históricamente.
Sinapsis también ofreció compartir el 56.5 por ciento de los beneficios, comparado con la oferta de un 35 por ciento de Secure Wrap.
Fue un golpe brutal para Secure Wrap, que mantuvo durante nueve años los derechos exclusivos en MIA, informando de ingresos anuales de unos $10 millones, y antes de eso había operado allí de forma no exclusiva.
Sinapsis dijo que esperaba más de $15 millones en ingresos en el presente año.
Durante años, Secure Wrap, administrada por Enrique “Henry” Ramos, y su grupo de cabilderos lucharon para que el condado pusiera a subasta el contrato de envolver los equipajes. En un momento dado, Secure Wrap alegó que era la única firma que tenía la autorización necesaria de la Administración de Seguridad en el Transporte (TSA) de EEUU para envolver los equipajes en los puestos de seguridad al lado del aeropuerto.
Para convencer al condado que pusiera a subasta la concesión, hizo falta una gran presión política por parte de Sinapsis – y un informe de Christopher Mazzela, inspector general de Miami-Dade, en septiembre del 2008 en el que urgió al condado a dar a otras firmas una participación en el codiciado negocio.
Líder en noticias de aviación