Etihad facturó el año pasado 4.100 millones de euros (unos 3.000 millones de euros), con lo que su margen quedó en el 0,34 por ciento, una cuota exigua incluso para la industria aérea, pero al menos con un resultado positivo, gracias al aumento de pasajeros en un 17 por ciento, y de una ocupación del 75,8 por ciento.
En 2011, además, Etihad ha potenciado su entrada en Europa con la ampliación de su participación en Air Berlin desde el 2,99 por ciento hasta el 29,2 por ciento, lo que ha provocado que la alemana haya cambiado su ‘hub’ de Dubai hasta Abu Dhabi.
Etihad, el año pasado, también celebró el primer aniversario de su alianza estratégica con Virgin Australia, cuyos frutos, según el consejero delegado de la compañía árabe, James Hogan, ha disparado los ingresos un 700 por ciento respecto al anterior acuerdo que antes tenían con Qantas.
Air Seychelles ha sido la última aerolínea en caer ‘en las redes’ de Etihad, después de que el pasado enero cerrase la compra del 40 por ciento de la africana. De momento, Etihad desmiente que de forma inminente vaya a entrar en una de las tres grandes alianzas, después de que el sector apuntase que la favorita es oneworld, a la que pertenece Iberia.
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