¿Por qué las ventanas de los aviones son tan pequeñas?

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Según un artículo publicado por El Universal, la principal razón es por la seguridad de quienes viajan. Las ventanillas son el punto más débil de una aeronave ya que, en lo aviones presurizados, la presión de la cabina es mayor que la de afuera, por lo que el fuselaje se expande y, si no está bien sellado, podría provocar un severo accidente.
Un punto a destacar es que, según el artículo, las ventanas del avión miden, en promedio, 27 centímetros de ancho y 40 centímetros de largo, aunque hace más de medio siglo erán de mayor tamaño.
«En los años 50, las ventanas de los aviones eran 30 centímetros más grandes que en la actualidad y fueron una de las principales razones de accidentes aéreos en esos tiempos. La compañía De Havilland descubrió que el fuselaje se rompía en las esquinas de las ventanas por corrosión del metal», explican.
Las características básicas
Así, según explica el artículo, las aeronaves no tienen cualquier tipo de ventana. «En tu próximo viaje, toca la ventana o pon tu dedo y notarás que parece ser muy gruesa; sin embargo, lo que sucede es que realmente está compuesta por tres paneles, dos de presión y un interior para evitar que los viajeros causen algún daño».
Lo curioso de todo esto es que se afirma que los fabricantes y diseñadores preferirían hacer aviones sin ventanas porque serían más baratos, más seguros y tendrían mayor capacidad de carga.
En todo caso, en la actualidad, para que todos los pasajeros disfruten del aterrizaje y la vista del destino, algunas aerolíneas están colocando cámaras de video para reproducir el descenso.
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