Qantas recortará 5.000 empleos y reducirá en 50 aviones su flota.
Qantas ha anunciado que recortará 5.000 empleos y reducirá en 50 aviones su flota hasta 2017, después de presentar unos ‘números rojos’ de 235 millones de dólares (172 millones de euros) durante la primera mitad de su ejercicio fiscal –finalizado el 31 de diciembre de 2013–, frente al resultado positivo de la mitad del ejercicio 2013, cuando ganó 109 millones de dólares (79,8 millones de euros).
Los ingresos de la aerolínea alcanzaron entre junio y diciembre de 2013 los 7.903 millones de dólares (5.786 millones de euros), un 4,1% menos en comparación con la cifra de negocios de la primera mitad del ejercicio anterior.
Por su parte, el beneficio operativo fue también negativo con unas pérdidas de 252 millones de dólares (184,5 millones de euros), frente al resultado positivo anterior de 220 millones de dólares (161, millones de euros).
De los 5.000 empleados afectados, unos 1.500 puestos laborales son funcionales y no operativos, además se cerrará la empresa de catering Adelaide, se mantendrá la congelación de los salarios de los ejecutivos, aplicada desde diciembre, y se extenderá a todo grupo Qantas.
La compañía australiana, que no repartirá dividendo a sus accionistas, pretende así reducir en 2.000 millones de dólares (1.400 millones de euros) sus costes y gastos de capital en tres años, según ha detallado en un hecho relevante a la Bolsa de valores ASX de Australia.
De esta cantidad, un total de 1.792 millones de dólares (1.311 millones de euros) se ahorrarán por menores costes y 895 millones de dólares (655 millones de euros) se reducirán en gastos de capital.
ABANDONO DE RUTAS NO RENTABLES.
El consejero delegado de Qantas, Alan Joyce, ha reconocido que la compañía afronta «una de las peores situaciones», por lo que es necesario reducir costes, lo que incluirá la flota dejando en tierra o vendiendo hasta un total de 50 aviones y aplazando la compra de los A380 y 787-8 de Boeing, ya anunciados, además de eliminar algunas rutas no rentables.
Joyce se comprometió a que el proceso de reestructuración sea lo «más fácil» para los empleados y justificó que este plan se financiará gracias a la modificación de las prioridades de gasto de capital de Qantas con el objetivo de «convertirse en una empresa más competitiva» dentro de tres años.
Durante los próximos 12 meses, Qantas saldrá así de rutas de bajo rendimiento e intercambiará en los aviones en algunos enlaces en función de la demanda.
Qantas también abandonará el alquiler del aeropuerto de Brisbane, lo que le supondrá un ahorro de 100 millones de dólares (73,2 millones de euros), pero mantendrá su contrato para el uso en una zona de la terminal hasta 2018.
Fuente: http://www.europapress.es/
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