Rusia exige acelerar investigación por derribo del avión de Malaysia Airlines.
Cuando está a punto de cumplirse el primer aniversario del derribo en Ucrania de un Boeing 777 de Malaysia Airlines con 298 personas a bordo, Moscú cuestionó el informe holandés filtrado, que culpa a los rebeldes prorrusos e insta a acelerar la investigación sobre la tragedia.
El presidente ruso, Vladímir Putin, habló este jueves por teléfono con el primer ministro de Holanda, Mark Rutte, país del que procedían la mayor parte de los pasajeros del vuelo, para asegurarle que va en interés de todas las partes acabar cuanto antes las investigaciones, reseñó Efe.
Según un comunicado del Kremlin, en la conversación «se discutió sobre la marcha de las investigaciones del siniestro del Boeing ocurrido el 17 de julio de 2014 en territorio de Ucrania y se subrayó el interés mutuo en que se lleven a cabo de forma fructífera».
El presidente ruso también consideró «prematuro» y «contraproducente» la posibilidad de que se cree un tribunal internacional para juzgar a los culpables del derribo, algo que han pedido países como Malasia y Holanda.
«Putin explicó con detalle la posición rusa de que es prematura y contraproducente la iniciativa de algunos países, incluida Holanda, de crear un tribunal internacional que juzgue a las personas responsables del derribo del avión malasio», según el comunicado.
La misma postura la defendió ayer el embajador de Rusia ante la ONU, Vitali Churkin, quien en declaraciones a medios rusos aseguró que «para investigar crímenes penales no es necesario crear un tribunal internacional».
El jefe del Kremlin también advirtió al jefe del Gobierno holandés en contra de que se filtren la prensa versiones «politizadas» sobre la investigación que culpan a los rebeldes prorrusos.
Putin hacía alusión a una información publicada por CNN, según la cual los investigadores holandeses del accidente del vuelo MH17 acusan a los rebeldes prorrusos de haberlo derribado.
Los medios holandeses se hacen hoy eco de esa información, que indica que el Consejo de Seguridad de Holanda, que dirige la investigación, ha distribuido su informe con esos datos a los organismos homólogos de los otros países que participan en las pesquisas, así como a la empresa aeronáutica Boeing, fabricante del aparato.
La víspera del primer aniversario de aquel suceso que conmocionó al mundo y supuso un salto cualitativo en la guerra que libran en el este de Ucrania los separatistas prorrusos y las tropas fieles al Gobierno de Kiev, Moscú ha redoblado sus intentos para desmarcarse de ese crimen.
Oleg Storchevói, jefe adjunto de Rosaviatsia, la agencia de aviación rusa, cuestionó hoy las conclusiones del borrador filtrado de la investigación holandesa.
«Tenemos mucho que decir sobre ese documento y mucho que contraponer a algunas de sus tesis», comentó Storchevói acerca del informe, que concluye que el vuelo MH-17 de Malaysia Airlines fue derribado por un misil lanzado desde territorio controlado por los sublevados.
Rusia, agregó, no se decanta por ninguna de las versiones sobre las causas de la tragedia y sostiene que hay que tomar en cuenta todos los antecedentes y no centrarse en buscar datos sólo en favor de determinada hipótesis.
«Puedo decir que yo mismo veo factores que señalan que el avión pudo haber sido alcanzado tanto por un cohete ‘tierra-aire’ como por uno ‘aire-aire'», dijo Storchevói.
Por ello, insistió en que los investigadores deben «estudiar detenidamente» todos los datos que apuntan a la hipótesis de que el avión malasio pudo haber sido abatido por un cohete «aire-aire, sobre todo porque hay numerosos testimonios de lugareños que aseguran haber visto un avión militar en el momento en que cayó el Boeing».
El vuelo, que cubría la ruta entre Amsterdam y Kuala Lumpur, fue derribado cuando sobrevolaba la región de Donetsk, en el este de Ucrania.
El borrador filtrado afirma que «se utilizó un misil ruso Buk tierra-aire, que se lanzó desde un pueblo controlado por los rebeldes prorrusos».
Holanda ha dicho que la investigación definitiva se dará a conocer a mediados del próximo octubre.
Además de 193 víctimas holandesas, viajaban en el avión 27 australianos, 44 malasios, 12 indonesios, 4 belgas, 4 alemanes, 9 británicos, 3 filipinos, 1 canadiense y 1 neozelandés.
Fuente: http://www.eluniversal.com/
Líder en noticias de aviación