Estados Unidos bate récords de pasajeros, a pesar de contar con menos vuelos. En 2017, el número de pasajeros en vuelos domésticos aumentó de forma considerable y parece ser que este 2018 volverá a pasar lo mismo. Este incremento de viajeros se debe a que las aerolíneas están usando aviones más grandes, es decir, ante la mayor capacidad de los aviones en número de asientos, según informa Travel Weekly.
Las aerolíneas llegaron en 2017 a los 741 millones de pasajeros, aun teniendo en cuenta que se redujo un 18,5% el número de vuelos. No obstante, el cambio hacia aeronaves más grandes permitió aumentar el promedio de pasajeros por avión, pasando de 69 a 91, según la Oficina de Estadísticas de Transporte de Estados Unidos (BTS por sus siglas en inglés).
Las compañías aéreas apuestan por recurrir a modelos que cuenten con una mayor capacidad de asientos, debido a las ventajas que ofrecen este tipo de aeronaves. Por un lado, ofrece una mayor comodidad que beneficia al consumidor, ya que incluye asientos y lavabos más grandes y presenta mejoras económicas, debido al ahorro en mantenimiento de motores y tarifas aeroportuarias. Asimismo, este cambio ha servido para reducir la cantidad total de pilotos, algo que era tremendamente necesario, dada la escasez de pilotos en el país.
Jetblue y Southwest Airlines han fortalecido la capacidad de sus aeronaves reemplazando gran parte de su flota. Delta, United y American también han aumentado el aforo de sus flotas principales. Sin embargo, son las aerolíneas regionales las que han llevado a cabo mayores cambios en su estructura aérea. El número de aviones con capacidad de entre 36 a 50 asientos se ha reducido de forma drástica para duplicar los dos tipos de reactores con cabida de hasta 90 pasajeros.
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