Boeing está en conversaciones para comprar su antigua filial Spirit AeroSystems mientras ambas compañías tratan de resolver los persistentes problemas de calidad y contener los costes relacionados con la producción del 737 MAX, según dijo este viernes una fuente de la industria familiarizada con el asunto.
Una fusión pondría a Spirit de nuevo bajo el paraguas de Boeing, que la escindió en 2005 y que en los últimos años ha luchado con presiones de costes y problemas que han ralentizado las entregas de aviones.
Spirit ha contratado a banqueros para explorar opciones estratégicas y ha mantenido conversaciones preliminares con Boeing, según informó The Journal el viernes, citando a personas familiarizadas con el asunto.
Boeing había considerado previamente la posibilidad de recomprar Spirit AeroSystems desde su desinversión, pero la óptica de comprar a un precio más alto fue uno de los factores que desalentaron tal movimiento, según una segunda fuente de la industria.
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Tanto Boeing como Spirit han estado en el punto de mira desde el incidente del 5 de enero, cuando un tapón de la puerta se desprendió de un avión 737 MAX en pleno vuelo.
La reincorporación de Spirit podría resolver algunos de los problemas de calidad, ya que daría a Boeing más control sobre la fabricación.
Este movimiento también ayudaría a Boeing a reducir los costes de producción de Spirit a través de economías de escala, dijo la segunda fuente de la industria.
«Está claro que Spirit está sufriendo mucho en estos momentos, y el riesgo regulatorio que pesa sobre su mayor programa, el 737, empeora las cosas», dijo Robert Stallard, analista de Vertical Research Partners.
«Para Boeing, esto les da la oportunidad de traer a Spirit a la empresa y solucionar sus problemas, pero Boeing, por supuesto, tiene sus propios problemas y últimamente no se ha cubierto de gloria en lo que respecta a la ejecución».
Spirit AeroSystems, uno de los principales fabricantes de estructuras para grandes aviones del sector, ha tenido problemas de liquidez en los últimos trimestres y problemas de calidad en los fuselajes que fabrica para los aviones Boeing 737.
Spirit también está estudiando la venta de sus operaciones en Irlanda que fabrican piezas para Airbus.
Con información de Reuters
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