EASA publica nuevas recomendaciones sobre baterías de litio en vuelos comerciales

La Agencia Europea de Seguridad Aérea (EASA, por sus siglas en inglés) ha emitido un nuevo Boletín de Información de Seguridad (SIB) con un llamado claro: reforzar las medidas ante el creciente número de incidentes relacionados con baterías de litio a bordo de aeronaves comerciales.

Estas baterías, presentes en dispositivos electrónicos como teléfonos móviles, ordenadores portátiles y drones, representan un riesgo significativo cuando no se manipulan correctamente. El documento actualizado recopila y sustituye boletines anteriores retirados, consolidando directrices esenciales para operadores aéreos, personal en tierra y, especialmente, pasajeros.

¿Por qué la EASA toma medidas ahora?

Según Jesper Rasmussen, director de estándares de vuelo en EASA, el detonante ha sido el incremento de eventos de seguridad relacionados con baterías de litio transportadas por pasajeros. “Cada viajero lleva entre cuatro y cinco dispositivos de este tipo en un vuelo. Es fundamental que las aerolíneas aseguren que los pasajeros saben cómo transportarlos de forma responsable”, afirmó.

Dispositivos permitidos y restricciones clave

El boletín detalla que los dispositivos electrónicos portátiles (PEDs) abarcan desde smartphones hasta herramientas eléctricas y drones. Sin embargo, equipos con baterías de alta capacidad como patinetes eléctricos, hoverboards y ciertos drones están prohibidos por reglamentación vigente.

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También se especifica que los power banks, al no clasificarse como PEDs, deben tratarse como baterías de repuesto, sujetas a restricciones adicionales.

Normas para pasajeros

La EASA enfatiza puntos cruciales para viajeros y operadores:

Riesgos y cómo prevenirlos

El mal funcionamiento de una batería de litio puede provocar sobrecalentamiento, incendio o emisión de humo tóxico, especialmente si sufre una ruptura, un cortocircuito o exposición al calor.

La EASA subraya que es responsabilidad compartida –operadores, personal de tierra y tripulación– conocer y actuar frente a estos peligros. Se hace hincapié en la formación del personal para gestionar incidentes con baterías que se sobrecalientan durante el vuelo y contener cualquier amenaza de fuego.

Un mensaje claro a las aerolíneas

La agencia europea insta a las compañías aéreas a reforzar la comunicación con los pasajeros. No basta con informar: hay que lograr que los viajeros entiendan y adopten conductas preventivas. Esto incluye explicar con ejemplos concretos qué dispositivos están autorizados, cómo deben embalarse y por qué es vital mantenerlos siempre bajo vigilancia.

También se recomienda alertar sobre peligros menos evidentes, como los PEDs atrapados en partes móviles del asiento, lo que puede dañar el dispositivo y desencadenar un incidente.

Con esta nueva directiva, la EASA busca cerrar brechas de seguridad en un entorno donde el uso de tecnología personal es constante. Para quienes vuelan, entender los riesgos y actuar con responsabilidad puede marcar la diferencia entre un vuelo seguro y una emergencia innecesaria.

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