Un vuelo de la aerolínea IndiGo, que cubría la ruta entre Nueva Delhi y Srinagar el pasado miércoles, se vio obligado a atravesar condiciones meteorológicas extremas después de que sus solicitudes de desvío fueran rechazadas tanto por India como por Pakistán. La situación ha puesto de relieve cómo los conflictos geopolíticos pueden afectar directamente la seguridad aérea y la toma de decisiones en cabina.
Denegaciones desde ambos lados de la frontera
El incidente ocurrió cuando el vuelo 6E 2142 se encontró con una fuerte tormenta durante su aproximación a la región de Cachemira, al norte de India. En un intento por garantizar la seguridad de los pasajeros, la tripulación solicitó desviarse hacia la frontera indo-paquistaní, pero esta petición fue denegada por la Fuerza Aérea India (IAF), según informó la Dirección General de Aviación Civil (DGCA).
Posteriormente, el equipo de vuelo contactó con el centro de control de Lahore, en Pakistán, para obtener permiso de entrada en su espacio aéreo. Esta segunda solicitud también fue rechazada. Ni la IAF ni la Autoridad de Aviación Civil de Pakistán ofrecieron comentarios al respecto.
Aterrizaje seguro pese al granizo
Ante la imposibilidad de desvío, la tripulación optó por la ruta más corta hacia su destino, lo que implicó atravesar la tormenta. El avión, un Airbus A321neo con capacidad para entre 180 y 220 pasajeros, logró aterrizar sin que se reportaran heridos. Sin embargo, una inspección posterior al aterrizaje reveló daños en el radomo de la aeronave, provocados por granizo.
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La aerolínea IndiGo confirmó que tanto los tripulantes de cabina como los pilotos actuaron siguiendo los protocolos establecidos, y que la aeronave fue retirada temporalmente de operación para someterse a revisiones técnicas en Srinagar. El regreso al servicio está condicionado a las autorizaciones de seguridad correspondientes.
Escalada de tensiones entre India y Pakistán
Este suceso no es un caso aislado. Se enmarca en un contexto de creciente tensión entre India y Pakistán tras un atentado mortal contra turistas en la región de Cachemira ocurrido en abril. Dicho ataque ha derivado en la mayor confrontación militar entre ambos países en casi treinta años, lo que ha incluido el cierre mutuo de espacios aéreos.
¿Qué implicaciones tiene esto para la aviación comercial?
El incidente con el vuelo de IndiGo deja al descubierto los desafíos que enfrentan las aerolíneas comerciales en regiones con alta sensibilidad política. La negativa simultánea de ambos países a permitir un desvío por razones meteorológicas plantea serias preguntas sobre los protocolos de cooperación regional y la prioridad que se otorga a la seguridad de los pasajeros frente a decisiones de carácter militar o político.
Este tipo de episodios subraya la importancia de contar con rutas alternativas y acuerdos bilaterales que permitan a los operadores aéreos actuar con mayor flexibilidad en situaciones críticas.
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